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Energía solar pasiva y activa ¿Qué es y por qué es importante?

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Cuando nos referimos a la energía solar, podemos describir dos tipos principales: la energía solar pasiva y activa. Ambas son esenciales para el buen aprovechamiento de la energía solar, al igual para que tus clientes puedan obtener todos los beneficios de esta.

Y como seguramente sabes la energía solar es una de las fuentes de energía más abundantes y sostenibles, por lo que saber aprovecharla en su totalidad y formas principales es esencial.

Por esta razón como instalador es necesario que comiences a saber más sobre la energía solar pasiva y activa, así que en este contenido te explicaremos más al respecto.

Índice

  1. ¿Qué es la energía solar pasiva y activa?
  2. Diferencia entre la energía solar pasiva y activa
  3. Beneficios de la energía solar pasiva y activa

1. ¿Qué es la energía solar pasiva y activa?

Energía solar pasiva y activa

La energía solar activa se refiere al tipo de tecnología que aprovecha la radiación solar al convertirla en otros tipos de energía, principalmente como energía mecánica o eléctrica. 

Es decir que este tipo de energía solar requiere de un mecanismo externo que le permita convertir y almacenar la energía generada, como es el caso de los paneles solares fotovoltaicos y los calentadores solares.

Por otro lado, la energía solar pasiva es aquel tipo de tecnología que aprovecha la radiación solar sin transformarla. La energía solar pasiva, en comparación con la activa, no usa ningún componente externo para transformar la radiación solar en energía, sino que la aprovecha en el momento que se recibe. 

La energía solar pasiva ocurre cuando se incorporan ciertos elementos en el diseño o rediseño de un edificio que permita optimizar la cantidad de la luz solar que llega al interior y regular la temperatura del edificio, por ejemplo:

  • Orientar un edificio de manera que los interiores reciban la mayor cantidad de luz solar posible en los momentos del día apropiados.
  • Uso de masa térmica y aislantes para regular el flujo de temperatura entre el interior y exterior.
  • Aprovechar corrientes de viento locales para poder diseñar ventanas y espacios abiertos y generar ventilación natural.

Por supuesto para aprovechar la energía solar pasiva requiere de un estudio detallado de todos los patrones que pueden afectar el desempeño de un edificio. Particularmente, se deben de considerar los patrones de clima, el viento, la humedad, la orientación solar e incluso la geografía. 

2. Diferencia entre la energía solar pasiva y activa

Como hemos mencionado, la energía solar activa implica convertir la radiación solar en otros tipos de energía a través de dispositivos externos como los paneles solares fotovoltaicos o los colectores solares. La naturaleza de este tipo de tecnología permite que se instalen dispositivos que almacenan la energía convertida, como las baterías fotovoltaicas.

En comparación, los métodos para aprovechar la energía solar pasiva se enfocan en maximizar el aprovechamiento que se le puede dar a la radiación solar en el momento en el que se presenta. La energía solar pasiva no se puede almacenar con un dispositivo externo, pero si se puede utilizar para maximizar la captación de calor solar en invierno y minimizarla en verano, así como para permitir la entrada de luz natural.

Si se realiza el diseño de un edificio de manera apropiada, usar energía solar pasiva puede generar un mayor ahorro que solo sistemas de energía solar activa, ya que se elimina la necesidad de usar energía en primer lugar.

3. Beneficios de la energía pasiva y activa

Como cualquier tipo de energía renovable, la energía solar pasiva y activa generan un ahorro energético para los dueños de una instalación siempre que la radiación solar esté disponible. 

Tanto la energía solar pasiva y activa se convierte en una inversión a largo plazo, debido a la larga vida útil de ambos tipos. Los paneles solares tienen una vida útil entre 25 y 30 años y las consideraciones bioclimáticas incorporadas en el diseño de un inmueble estarán disponibles siempre que este se use. Además, ambos tipos de tecnología tienen costos bajos de mantenimiento, convirtiéndolas en estrategias atractivas para reducir gastos. 

Cabe señalar que estos beneficios se manifiestan de manera diferente dependiendo del tipo, por ejemplo:

Beneficios de la energía activa

  • La energía solar activa permite la generación directa de electricidad a partir de la luz solar mediante paneles fotovoltaicos, lo que puede reducir significativamente la inversión económica.
  • Los sistemas activos pueden utilizarse en una amplia variedad de aplicaciones, desde la generación de electricidad en techos residenciales hasta la producción de calor para sistemas de calefacción y agua caliente sanitaria en instalaciones comerciales e industriales.
  • Los sistemas de energía solar activa pueden ser escalables y adaptarse a las necesidades específicas de cada usuario.

Beneficios de la energía pasiva

  • Reduce significativamente la necesidad de energía auxiliar para calefacción, refrigeración e iluminación, lo que conlleva un menor consumo de energía.
  • Los diseños pasivos suelen requerir una inversión inicial menor, ya que no incluyen componentes mecánicos o tecnológicos complejos.
  • El diseño pasivo puede mejorar el confort térmico de los edificios al optimizar la entrada de luz solar y la ventilación natural, creando espacios interiores más agradables, por lo que ante ausencia de luz eléctrica estos no se ven afectados en gran manera.  

Conclusiones

Hemos llegado al final de este contenidos sobre la energía solar pasiva y activa, sin duda es este tipo de información es útil para los negocios porque te permiten tener un mayor conocimiento sobre el mercado y lo más conveniente para tus clientes.

Si quieres conocer más sobre las instalaciones solares y el sector fotovoltaico, te invitamos a visitar nuestro blog.